A
esta cuestión, se me ocurre responder con otra pregunta: ¿puedo
dormir con mi pareja, hermano, hijo...?, ¿es aconsejable que
comparta el sofá con algún familiar o amigo?...algunos ya se
estarán llevando las manos a la cabeza y diciendo:”¡¡los perros
no son seres humanos, no los puedes comparar ni tratar como si lo fueran!!”...
A lo que respondo, que no lo pretendo ni quiero, mas
creo firmemente que cada
individuo, animal racional o no, es único, y
ha de ser respetado como tal independientemente
de su especie.
¿Acaso
no consideras a tu peludo tu mejor y más fiel amigo? ¿por qué
entonces no disfrutar de su presencia y de la magia de estar juntos?¿Acaso
a tí no te gusta compartir tu tiempo, sea donde sea, con aquellos a
los que más quieres? A ellos también.
Desde
que tengo la suerte de compartir mi vida con los ángeles de cuatro
patas he conocido argumentos de todo tipo para decirme qué hacer y
qué no respecto a su educación, higiene, paseos...y siempre he
tenido mis filtros, escuchando a mi corazón y dejándome guiar por
mi instinto, considerando lo mejor para todos y haciendo caso omiso
de leyendas urbanas y prejuicios.
Puedo
decir orgullosa que hasta la fecha, y espero que por mucho tiempo,
mis pequeños crecen sanos y felices. Por supuesto, nadie nace
sabiendo, ni tampoco llegan con un manual de instrucciones bajo la
pata, sé que he cometido errores que me han servido para aprender,
aún hoy en día, gracias a mis peques, este autoaprendizaje
continua.
Mis
peludos son mi familia adoptiva, me siento tremendamente afortunada
de tenerlos a mi lado, cada día doy gracias por las que siguen
conmigo y echo en falta a aquellos que ya cruzaron el arco iris, mas
siempre presentes en mi corazón.
En
un futuro no muy lejano, e incluso desgraciadamente en la actualidad,
los perros han sido y son considerados como simples herramientas de
trabajo (defensa, guarda, caza, crianza...) tratados como objetos
prescindibles que “tirar a la basura” cuando ya no sirven para el
fin por el que fueron adquiridos.
Ignorando que son seres vivos que
sienten y padecen, no meras
posesiones que usar al antojo del hombre. Demasiada
ignorancia y egoísmo humano responsable del sufrimiento de
demasiados inocentes...pena y vergüenza de “sociedad civilizada”.
A
todos los que os consideráis conocedores y amantes de los animales,
mas no los respetáis ni tratáis como vuestro igual, creyendo que
sois superiores por vuestra, más o menos, “inteligencia”,
guardaros vuestros consejos y sugerencias de cómo he de tratar a mis
perros, a mi familia, Gracias.
Yo
disfruto con una buena sesión de manta y sofá, viendo una película
o leyendo un buen libro teniendo a mis peques acurrucadas a mi lado.
¡¡ Buenos días !! |
Cada
noche duermen conmigo, tienen su sitio adjudicado en nuestra cama.
Hay quien ronca y hay quien de vez en cuando tiene pesadillas, la una para nada molesta y a la otra, con suavidad se la calma.
A veces,
cambian de postura o se levantan a beber agua...y qué? yo también
lo hago, yo también puedo sin intención desvelarlas. Nadie se queja.
Despertar
con sus lametazos me da la vida, no lo cambiaría por nada, y si por
eso hay quien me llame loca, viva la locura y a mucha honra!!
Por
supuesto, al igual que yo, siguen una rutina de higiene personal, de
la que yo misma me hago responsable. Sus vacunas y desparasitaciones,
tanto internas como externas, están al día. No me preocupa en
absoluto que puedan “pegarme nada”.
Más
me asustaría acercarme a algunos humanos por lo que pudieran
contagiarme (y no hablo sólo en el plano físico)
Hay
quien pensará que con esta forma de actuar “humanizo” a mis
peludos...no se equivoque, simplemente convivo con ellos, que
es distinto, tengo muy claro que somos especies diferentes, aunque
con necesidades básicas muy parecidas (protección, afecto, refugio,
comida...) necesidades que me esmero en cubrir, cuidando su y nuestro
bienestar físico y mental, ésto es, cuidando de la salud de toda la
familia, humana y canina.
No
obstante, he de aclarar que considero que siempre el perro ha de
saber que eres tú, su educador, el que decide compartir el
mobiliario de la casa, porque es a tí a quien éste pertenece. Ha de
aceptar cederte el lugar en cuanto tú se lo pidas.
Si
tu pequeño tiene algún problema de agresividad territorial, no es
aconsejable que le permitas disponer del hogar a su antojo, pues lo
tomará como suyo, mejor deberías acudir a un especialista.
De
igual manera, si tu peludo sufre hiperapego o ansiedad por
separación, tampoco es recomendable que alimentes su dependencia,
dejando que esté continuamente pegado a ti, deja que te guie un
experto en el tema.
Imagina
que eres su tutor, han de saber que pueden confiar en ti, que estás
ahí para protegerles, quererles, educarles...pero no te deben faltar
al respeto ni olvidar quien toma las decisiones.
Con
ésto, ni mucho menos te estoy diciendo que hayas de tener mano dura,
nada más lejos de mi intención, si no que desde la firmeza, la
calma y la constancia, has de ser capaz de trasmitirles esa seguridad
y ese deseo de “seguirte”, tal y como ocurriría en su estado
natural.
Piensa
que por mucho que crezcan, siempre van a necesitarte, no pueden
“independizarse” y sobrevivir en nuestro mundo humano sin tu
ayuda. Para bien o para mal, necesitan ir de tu mano hasta el final,
no se lo niegues y sé su fiel compañero de viaje, igual que ellos
son tu más leal, verdadero y auténtico mejor amigo.
Y
ahora dime, qué te ha parecido, ¿duermes tú también con tu peludo?, ¿te unes a la locura? :-)