No
obstante, no hemos de olvidar que con todo ello también llega el
momento de extremar la precaución en el cuidado de nuestros amigos/as
peludetes.
Hemos
de protegerlos, a través de pipetas y/o collares, contra inquilinos
indeseables varios, como garrapatas, mosquitos, pulgas...que aumentan
considerablemente su población desde la primavera. Revisarlos
frecuentemente para localizar y extraer pinchos y/o espigas que
podrían hacerles mucha pupa, si no se extraen a tiempo.
Y
tener mucho, mucho cuidado con los temidos golpes de calor. Estos
realmente pueden aparecer en cualquier época del año, siempre que
el animal realice ejercicios demasiado intensos, o sufra una tremenda
excitación. Aunque, claro, el aumento lógico de la temperatura
ambiente en esta estación, también aumenta su probabilidad de
aparecer.
Pero,
¿en qué
consiste un golpe de calor o hipertermia?, pues
como su propio nombre indica, en una subida repentina y peligrosa de
la temperatura corporal. De por sí, los perros, a diferencia de los
humanos, no pueden regular ésta mediante el sudor, debido a que
simplemente no tienen glándulas sudoríparas como tales repartidas
por todo cuerpo, sino que eliminan el calor a través del jadeo, por
las almohadillas de sus patas y por las zonas aisladas con poco pelo,
como es el vientre.
A
tod@s nos suena la siguiente imagen,
nuestro peludín espatarrado en el suelo, refrescándose la
barriguita, ¿verdad?
Si
a esta parca termorregulación le agregamos el incremento de la
temperatura ambiente en las fechas señaladas y que su temperatura
corporal normal es más alta que la nuestra, 39,5 º aproximadamente,
obtenemos la bomba explosiva que si no prevenimos y tratamos a tiempo
puede causarles incluso la muerte.
Además
conviene saber que hay razas que son más propensos a sufrirlo, los
llamados perros braquicéfalos o los que yo denomino
con mucho cariño, "chatos", como son
el
bóxer, el bulldog, el carlino... Estos pequeños, por razones
genéticas llevadas de la mano de razones estéticas humanas, en las
que ahora no viene al caso entrar, sufren problemas respiratorios por
una malformación del paladar, que es muy estrecho, lo que se traduce
en una menor entrada de aire, menor resistencia al calor, y
también
provoca los
conocidos
ronquidos.
Síntomas
que presenta el perro por un golpe de calor:
|
||
Fatiga, sin ganas de moverse
Temblores musculares, vómitos
Pérdida del equilibrio, se tambalea
Jadeo o respiración constante y rápida
Aumento de la temperatura corporal
Coloración azulada de lengua y encías
Y si el perro no es atendido, los Síntomas se Agravan :
Edema cerebral
Insuficiencia hepática y/o renal
Hemorragía gastrointestinal
Fallo Multiórganico
La
mejor defensa: La Prevención,
a través
de unos sencillísimos pasos:
Mantener
a nuestro compi peludo siempre hidratado, ha de tener en todo
momento agua limpia y fresca a su disposición. Además, si vamos a
hacer largos paseos, es útil llevar en la mochila una botella de
agua y un bebedero, tampoco vendría mal hacerse con un difusor en
cualquier tienda de euro y mantenerlo lleno de agua en la nevera,
para refrigerar de vez en cuando la zona del cuello, las axilas y el
vientre, las más sensibles y agradecidas
Evitar pasear o ejercitar en las horas puntas de calor, los paseos han de ser un momento agradable para todos, salir a explorar cuando el sol más aprieta es una tortura para toda la manada y una locura que puede tener un precio demasiado alto. Además, dañarás sus almohadillas. Respeta la digestión de tu peludo, después de comer es cuando son más propensos a sufrir colapsos.
Bajo
ningún concepto deja a tu compañer@ encerrad@ en terrazas
acristaladas o en el coche, ni siquiera “dos minutos”, o
mientras haces “pequeños recados”...el vidrio consigue que la
temperatura aumente de forma rápida y considerable, será como poner
a tu pequeño/a al horno. NO LO HAGAS!!
Si tu
peludo pasa mucho tiempo en un patio o jardin, NUNCA ATADO,
acondiciona una sombra en la que pueda refugiarse.
Primeros
auxilios
Si a
pesar de todas tus precauciones sospechas que tu mejor amigo/a sufre un
golpe de calor, aquí te dejo una guía de primeros auxilios, pero
siempre deberás llevar a tu peque al VETERINARIO
DE MANERA URGENTE.
No se
le bajes la temperatura de golpe, ya que podrías provocar el efecto
contrario, hipotermia y shock, con efectos igual de mortales. La
temperatura debe bajar de forma paulatina y el animal debe
rehidratarse y recuperar el azúcar y las sales que ha perdido, xej.
Dale de beber agua mezclada con aquarius.
Humedece
su boca, ej. pásale un hielo por los labios, pero NUNCA LE FUERCES A
BEBER, ni permitas que beba en exceso.
Humedece
(sin envolver ni tapar) principalmente cuello, vientr, ingles y
axilas mediante paños mojados en agua no muy fría (a unos 20º) o
un pulverizador de agua. NUNCA CUBRIRLO CON TOALLAS HÚMEDAS.
Llevarlo
a un sitio fresco.
Cuando
la respiración sea normal, sobre una toalla húmeda, llévalo
rapidamente a tu veterinario de confianza, necesita medicación para
recuperarse, y una evolución controlada por expertos.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinión es importante